«La Chacallada» es una danza agrícola de celebración ritualizada
de la vida y la fertilidad de los campos, en la que participan
grupos de danzantes campesinos en una compleja e intensa
coreografía que cumple la función de agradecer a las divinidades
por la producción reciente y atraer sus favores para la próxima
temporada productiva.
Es una danza que tiene como objetivo
agradecer a la tierra, con ritmo y vigor, por sus primeros
frutos.
El origen tiene esa danza en los ritos arcaicos, pre tiawanaku, en honor a la Pachamama y las divinidades asociadas al agua, así como en los rituales con fines propiciatorios que marcaron el devenir de esas sociedades.
La palabra «chacallada» podría provenir de la palabra aymara «chacallo» que significa «haba verde», entendida como primer brote o primer fruto y que adquiere una valoración simbólica relacionada a la fertilidad dentro de los rituales de propiciación en el altiplano.
En la actualidad la danza «La Chacallada» del distrito de Chucuito, provincia y departamento de Puno, se baila durante la época de carnavales, por lo que no sólo se le asocia a la celebración de la tierra sino a la fecundidad en general y a los ritos de enamoramiento entre las parejas jóvenes.
Esta danza se practica en diversos escenarios, tanto en la zona rural como en la zona urbana. En el caso de la zona rural, se realiza en los alrededores de las chacras y en los espacios sagrados, como parte de las challas o ceremonias de culto y ofrendas a la tierra. En la zona urbana suele representarse en recintos como estadios o auditorios en el marco de espectáculos, concursos o celebraciones diversas.
Uno de estos suele ser el Concurso de Danzas Autóctonas que se realiza como parte de las celebraciones por la Festividad de la Virgen de la Candelaria de Puno, en febrero. Si bien la ejecución de la danza en la zona urbana o en auditorios y estadios, ha sido siempre bien vista, es su representación rural, en las chacras, la que mantiene sus características originarias y su contexto ritual. El carnaval de Chucuito es el contexto festivo pertinente para esta danza y con el que la misma está intrínsecamente relacionada.
Durante el carnaval de Chucuito, también denominado marapacheta, la danza La Chacallada tiene un rol protagónico. En Chucuito, el carnaval coincide con la primera semana de la Cuaresma, tiempo litúrgico de cuarenta días de reflexión espiritual previo a la fiesta de la Pascua o Semana Santa, dentro del calendario católico.
Mayo 2016
Fuente y foto: ANDINA